¿Es recomendable caminar con una hernia discal?

Muchos de los pacientes que llegan a mi consulta se sorprenden cuando les sugiero realizar ejercicio físico para mejorar sus problemas de espalda. Si tú también te preguntas si es adecuado caminar con una hernia discal o alguna otra lesión en la espalda, este artículo te será útil.

¿Por qué es beneficioso caminar con hernia discal?

Uno de los síntomas de la hernia de disco incluye dolor en la zona lumbar, hormigueo en las piernas, dolor ciático, pérdida de fuerza en las piernas y molestias al pararse.

Cuando estos síntomas se presentan, especialmente si se inflama el nervio ciático es normal que caminar resulte incómodo y que se sienta la necesidad de descansar por algunos días. Sin embargo, este reposo no debe extenderse más de uno o dos días, siempre tratando de movernos lo máximo posible. El reposo absoluto no es recomendable, ya que puede provocar pérdida de masa muscular y fuerza debido a la inactividad.

Este debilitamiento muscular es precisamente lo que la musculatura de la espalda necesita evitar, ya que para mantener la estabilidad de la columna vertebral, los músculos deben estar activos. Por lo tanto,  caminar es beneficioso cuando se tiene dolor de espalda además de realizar estiramientos y ejercicios para fortalecer la zona lumbar.

Y más concretamente, cuando hablamos de lumbalgia y hernia discal, existen determinados tipos de ejercicios efectivos muy efectivos. Igualmente existen esquemas de estiramientos para hernia discal que te interesa practicar.

Beneficios de caminar a diario

Además de fortalecer los músculos y evitar su atrofia, andar con hernia discal conlleva otros beneficios importantes:

Aporta equilibrio a tu cuerpo

Caminar es una actividad simple pero poderosa para mejorar el equilibrio y la estabilidad del cuerpo. Al fortalecer los músculos de las piernas, el core y la espalda, ayuda a mantener una postura adecuada y a reducir el riesgo de caídas. Además, promueve una mejor coordinación y alineación corporal, beneficiando la columna y las articulaciones. Incluir caminatas diarias en tu rutina es una forma efectiva y natural de mejorar tu bienestar físico y prevenir desequilibrios musculares. ¡Da cada paso con salud!

Mejora la higiene postural

Al caminar ayudamos a que la columna vertebral no pierda su curvatura natural, evitando así, desviaciones, escoliosis o la hiperlordosis.

Caminar de forma regular no solo fortalece los músculos, sino que también contribuye a una mejor higiene postural. Al mantener la cabeza erguida, los hombros relajados y el abdomen activo, se favorece una alineación correcta de la columna. Además, caminar activa los músculos estabilizadores, reduciendo la sobrecarga en la espalda y previniendo dolores posturales. Adoptar una buena técnica al caminar es clave para cuidar la postura y evitar desequilibrios musculares. ¡Camina con conciencia y cuida tu columna!

Mejora la circulación. Ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares

Caminar es un ejercicio sencillo pero esencial para la salud del corazón. Al activar la circulación sanguínea, favorece el retorno venoso y reduce la presión arterial, disminuyendo el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Además, fortalece el músculo cardíaco, mejora la oxigenación del cuerpo y ayuda a controlar el colesterol y el azúcar en sangre. Incluir caminatas en tu rutina diaria es una forma efectiva de proteger tu corazón y mejorar tu bienestar general. ¡Cada paso cuenta para una vida más saludable!

Favorece la motilidad intestinal evitando el estreñimiento y las hemorroides.

El movimiento regular al caminar estimula el tránsito intestinal, favoreciendo una digestión más eficiente y reduciendo el riesgo de estreñimiento. Además, al mejorar la circulación sanguínea en la zona abdominal y pélvica, ayuda a prevenir la aparición de hemorroides. Esta actividad, combinada con una hidratación adecuada y una dieta rica en fibra, es clave para mantener un sistema digestivo saludable. ¡Camina a diario y cuida tu bienestar intestinal!

Mejora la calidad del sueño.

Caminar no solo fortalece tu cuerpo, sino que también mejora tu descanso. Una caminata diaria ayuda a reducir el estrés, regular tu reloj biológico y aumentar la calidad del sueño profundo. Si sufres de insomnio o te despiertas cansado, prueba incluir más pasos en tu rutina y siente la diferencia.

Tu columna y tu descanso te lo agradecerán. ¡Muévete para dormir mejor!

Permite socializar y mejorar el estado anímico

Caminar no solo es un ejercicio simple y efectivo, sino también una oportunidad para socializar y mejorar tu estado de ánimo. Un paseo al aire libre con amigos o familiares fomenta la conexión, reduce el estrés y libera endorfinas, ayudándote a sentirte más relajado y positivo.
Muévete, disfruta y cuida tu salud, ¡paso a paso!

Consejos para andar con hernia discal

Caminar es un ejercicio de bajo impacto que puede beneficiar a quienes tienen una hernia discal, siempre que se realice con la técnica adecuada. Adoptar una buena postura, elegir el calzado correcto y respetar los límites del cuerpo son claves para evitar molestias y favorecer la recuperación. Con algunos ajustes, esta actividad puede ayudar a mejorar la movilidad, reducir la rigidez y fortalecer la columna de forma segura. ¡Descubre cómo caminar sin riesgos y cuidar tu espalda!

No tienes que sentir dolor

Si al andar notas dolor de espalda, conviene que pares la marcha. Pero recuerda que no debes confundir el dolor con la sensación de agotamiento muscular.

Haz descansos y alivia las cargas

Para evitar molestias al caminar, sobre todo cuando comiences esta práctica, conviene que sólo camines unos minutos y hagas descansos para después reanudar la marcha. Durante estos descansos conviene prestar atención a nuestro cuerpo. Si notas que estás cansados o que la musculatura a los lados de la columna está cargada tendrás que parar unos minutos más para así descansar esos grupos musculares y aliviar la carga si es que la llevas. Si, por el contrario, ves que no se produce dolor lumbar u otro tipo de dolor de espalda puedes incrementar poco a poco la duración total del ejercicio.

Bien erguido, hinchando el pecho y metiendo abdomen

La postura con la que camines también es importante. Evita ir cabizbajo y, en cambio trata de caminar erguido, hinchando el pecho y metiendo el abdomen. De este modo vas a poder andar con la espalda correctamente equilibrada con sus curvaturas normales. Además, procura que la mirada siempre esté dirigida hacia el frente para conservar una adecuada lordosis cervical.

Lleva calzado correcto para amortiguar la pisada

¿Sabías que las pisadas impactan en tu espalda? Pues sí. El impacto de las pisadas se transmite desde el pie hasta la columna. Por eso, para evitar dicho impacto, es necesario utilizar un calzado correcto que permita amortiguar el impacto de cada pisada.

Nada de peso extra

Si tienes hernia discal u otro problema de espalda, no debes cargar con peso y, si es imprescindible llevar algo, procura que pese lo menos posible y que vaya en una mochila. Si no es posible y va en bolsas, procura repartir el peso a ambos lados de la columna.

Balancea y mantén el equilibrio

Tanto si sales a caminar como una actividad física deportiva o simplemente para desplazarte, es necesario que balancees de forma natural los brazos. Esto te ayudará a equilibrarte en cada zancada y repartir mejor las fuerzas.

Evita ir mirando y manejando el celular

Si mientras vas caminando estás mirando y manejando el móvil u otro soporte electrónico, vas a ver cómo adoptas una mala postura, sobre todo en la zona cervical de la columna. Además de esa mala postura, también se va a incrementar el riesgo de tropiezos y accidentes por ir distraído. Y puesto que llevas el móvil en las manos, esto hará que pierdas ese correcto balanceo de los brazos, que ya hemos comentado.

Caminar no es correr

Como he comentado, es bueno andar con hernia discal, pero estos beneficios no son iguales que cuando corremos. Al hacer running, la espalda recibe movimientos bruscos que no son adecuados para resolver estos problemas. Concretamente, las vértebras de la columna se ven especialmente afectadas si existe una hernia o un prolapso del disco intervertebral.

Tampoco es bueno montar en bicicleta con hernia discal

El solo hecho de sentarse en una bicicleta y comenzar a pedalear incrementa la tensión y el trabajo muscular en la zona lumbar, modificando la posición de las vértebras de la espalda. Si además rodamos por una zona irregular o de piedras, el alto impacto repercute en la espalda, aunque la bici tenga buena amortiguación.

¿Y si continúan las molestias?

Como ves, existen muchas y muy buenas razones por las que es bueno andar con hernia discal. Pero si, a pesar de caminar habitualmente y de hacerlo siguiendo estos consejos, notas que el dolor de espalda continúa e incluso va a más, es necesario dar con un diagnóstico o tratar de obtener una segunda opinión médica.


El diagnóstico es el principio de todo tratamiento y sin él no podemos resolver ningún problema de espalda. Si quieres poner fin a tu dolor de espalda, puedes solicitar ahora tu diagnóstico online. Para ello, voy a necesitar que me envíes tu historial médico, así como las pruebas diagnósticas que tengas realizadas para que pueda estudiar tu caso detenidamente antes de que tengamos nuestra primera consulta online. Si no tienes hecha ninguna prueba diagnóstica, te indicaré dónde puedes hacerla cerca de tu casa.